Francy Ortiz es directiva escolar en un colegio privado. Sus emociones han sido como una ruleta rusa: sorpresa, tristeza, rabia y alegría. El confinamiento le ha permitido resignificar la escuela, resignificar el valor de las noticias y resignificar la cotidianidad de la vida. Destaca el rol de los maestros por su compromiso y dedicación con sus estudiantes.