Por Magali Pinilla*.
Muchos son los esfuerzos e iniciativas que a lo largo y ancho del país pretenden hacer del aula un lugar de reflexión, memoria y, en especial, de construcción de paz. Esto, en respuesta a la desesperanza que ha sembrado el conflicto armado en la sociedad colombiana. El nuestro, es un homenaje a las memorias que lleva consigo el río Cauca con la serie podcast “Pescadores de esperanza. Tejiendo redes de convivencia y paz”.
Las líneas a continuación buscan compartir lo realizado en un pequeño colegio al nororiente de la ciudad de Bogotá en cabeza de un grupo de estudiantes de la mano de algunos de sus maestros.
Para comprender por qué llegamos a “Pescadores de esperanza. Tejiendo redes de convivencia y paz”, por parte del Colegio Anexo San Francisco de Asís (CASFA), debemos remontarnos 38 años atrás. En ese entonces, un grupo de mujeres pertenecientes a la congregación franciscana de nuestra señora de Lourdes tenía como objetivo brindar educación a los niños y jóvenes más desfavorecidos del nororiente de la ciudad. Guiadas por los principios de la espiritualidad francisclariana, estas mujeres formaron a diversas generaciones inculcando valores de la paz, la no violencia, la justicia, la hermandad y reverencia por todo lo creado.
Foro Institucional
Siguiendo con esta misma línea espiritual, desde el 2016 se llevó a cabo el Foro Institucional, un espacio dirigido por estudiantes de noveno grado. En 2018, este espacio adoptó como eje central el conflicto armado. A partir de ese año, los estudiantes asumieron el reto de dialogar con otros adolescentes y jóvenes acerca de la historia reciente de nuestro país. Este proceso se manifestó a través de dudas, temores, tareas, frustraciones, aprendizajes y, sobre todo, significó una aproximación a más de seis décadas de historia de Colombia.
Para asumir este reto, se echó mano del arte, se reconocieron las voces de las víctimas, y se cuestionaron las narrativas difundidas en los medios de comunicación y las redes sociales. Todo esto para compartir con propios y extraños lo sucedió a cientos de kilómetros de la ciudad que habitan.
El Foro ha evolucionado a lo largo del tiempo y ha adoptado diferentes formas. Cuatro han sido las versiones del Foro, hoy Minga Pedagógica de Memoria y Paz, referidas al conflicto armado: Con arte y parte las memorias son arte (2019), Los colores de una memoria gris (2021), Retratos de un Colombia Ausente (2022) y Cuando el Cauca Suena memorias lleva (2023).
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Si bien todas las versiones mencionadas han contribuido para transformar a los estudiantes vinculados en emprendedores de memorias, es importante resaltar cómo las dos últimas han trascendido los límites del aula y la institución. Estamos tejiendo lazos con instituciones vecinas y amigas para promover juntanzas, escenarios de escucha y vínculos con víctimas de desaparición forzada y sus familias.
Búsqueda de memorias comunes
Hablar de conflicto armado a adolescentes y jóvenes que no lo han vivido o conocen poco del mismo, es una labor compleja. Para muchos, este acontecimiento de larga duración parece distante y relegado al pasado, ocurrido en lugares lejanos.
Sin embargo, desde la asignatura de Ciencias Sociales, se planteó la búsqueda de lugares comunes entre aquellos afectados por el conflicto armado y los estudiantes del CASFA. Para lograrlo, nos sumergimos en las formas en que el pasado se manifiesta a través de imágenes, olores y sonidos. Recordamos el álbum familiar, el aroma a chocolate en los desayunos en familia o las canciones que nos transportan a las celebraciones decembrinas.
Teniendo en cuenta estas formas de memoria y los puentes que establecen entre las personas, llevamos a cabo investigaciones en las clases de Ciencias Sociales, visitamos la exposición ‘El Testigo’ de Jesús Abad Colorado y organizamos conversaciones y talleres con expertos. Mantuvimos extensas conversaciones con Erik Arellana, Pilar Navarrete, Luz Marina Bernal y Magdalenas por el Cauca. De esta manera, la Minga Pedagógica de Memoria y Paz de los años 2022 y 2023, con el apoyo y la colaboración de los docentes de Sociales, Español, Música y Química, pudo elaborar y honrar la memoria de los casi 80.000 desaparecidos reportados en el país.
«Retratos de una Colombia Ausente» y «Cuando el Cauca suena, memorias lleva» se convierten así en un esfuerzo desde la vida misma de la enseñanza de la historia reciente, del conflicto armado y de la desaparición forzada. Se trata de una invitación a ver, oler y escuchar a aquellos que, aunque ausentes, continúan siendo y estarán siempre presentes.
Homenaje a desaparecidos
Compartir y prestar los sentidos significó, para mayo del 2022, retratar la ausencia de siete personas desaparecidas. A través de la fotografía, se interpretaron sus memorias, una representación visual que se entrelazaba con siete historias de vida en respuesta a la pregunta: ¿Qué sería de Rafael San Juan Arévalo, el Padre Tiberio, Nydia Erika Bautista, Cristina del Pilar Guarín, Jorge Mario Monsalve, Fair Leonardo Porras y Dubán Felipe Barros si estuvieran aquí?
Para responder a este cuestionamiento, los estudiantes de noveno grado del año 2022 se adentraron en la vida de cada una de las siete personas, basándose principalmente en conversaciones con familiares de Nydia Erika, Fair Leonardo y Dubán. También se tuvieron en cuenta los testimonios de los habitantes de Trujillo, Valle, presentes en la publicación del Centro Nacional de Memoria Histórica «Tiberio, vive hoy», así como la obra de teatro «Antígona de Mujeres» y otras fuentes donde la voz de las víctimas y sus familiares era central.
Gracias a este proceso, entre octubre y noviembre de 2022, emerge DesapareSER con el apoyo del Centro de Memoria, Paz y Reconciliación, al haber obtenido una de sus becas «Escuelas como Lugares Narrativos de Memorias». DesapareSER es una iniciativa sensorial más compleja que busca desarrollar una experiencia olfativa y sonora que refleje las memorias de estas siete personas ausentes. El resultado son imágenes, perfumes y paisajes sonoros presentados a modo de libro que narra estas historias.
DesapareSER no solo involucró a un grupo de adolescentes y jóvenes, junto con su maestra de Ciencias Sociales, sino que también contó con la colaboración de docentes de Química y Música. Además, dio lugar a la creación de un poema, una canción y una insignia: «DesapareSER, sí, con S, como una forma de afirmar que, gracias a la memoria, los ausentes permanecen, siguen siendo, siguen estando».
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Escuchar al río Cauca
DesapareSER marcó un hito al conectar con lo realizado en marzo de 2023, retomando la iniciativa de «Magdalenas por el Cauca» para crear la poderosa metáfora de «Escuchar el río». Esta propuesta infundió vida a cientos de kilómetros de distancia de su nacimiento, convirtiendo al río Cauca, una de las principales fuentes de agua del país, en un símbolo de memorias y ausencias en medio del conflicto armado.
Escuchar el río Cauca, sus memorias y las ausencias que lo habitan, significó despojarlo de su significado como escenario de dolor, para acoger de nuevo sus corrientes como fuente de vida, trabajo, labriego, construcción del territorio y de historias vida. Por otro lado, disponer los corazones implicó que los estudiantes atendieran a la invitación de “ponerse en los zapatos” de 93 personas encontradas sin vida en el Cauca por el equipo de bomberos de Marsella. Fue así como se decidió contar la historia de 46 de estos 93 colombianos, que en su mayoría aún son buscadas por sus familiares, al otorgarles un nombre, una identidad y recrear sus vidas, a partir de la intervención de un zapato.
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Pescadores de esperanza
Guiados por estas memorias, los estudiantes de noveno grado del año 2023 definieron la reconciliación como «Disponer el corazón para escuchar a la naturaleza, a nosotros mismos y a los demás», tras un extenso proceso de investigación, análisis y reflexión. Este proceso contó con el respaldo de las clases de ciencias sociales, el acompañamiento del programa ECO de la Secretaría de Educación Distrital, interacciones con un geógrafo de la Universidad Nacional, el observatorio sobre conflicto del Ministerio del Interior y diálogos con los investigadores de Rutas del Conflicto.
Paralelamente al trabajo con los estudiantes de noveno grado, se llevaron a cabo talleres con los estudiantes de otros grados del colegio, centrados en la reconciliación y la importancia de construir la paz desde la escuela.
Este esfuerzo encontró su expresión máxima en el montaje de la noche artística, donde el río Cauca fue evocado a través de la música y la danza. Grandes y pequeños, al son de las diez composiciones musicales, rindieron homenaje a las memorias que lleva consigo el gran río, dándole forma de susurros de quienes ausentes siguen siendo y siguen estando y susurros que buscan oídos para que sus fuerzas, historias y memorias sean contadas.
Las diez composiciones musicales se convierten en las cinco series del podcast “Pescadores de esperanza. Tejiendo redes de convivencia y paz”: Atardecer, Sueño, Vida, Semillas y DesapareSer, cuya producción es una realidad con el apoyo de Educalidad y el Politécnico Grancolombiano.
*Profesora Colegio Anexo San Francisco de Asís, CASFA
