Las mujeres negras, afrocolombianas, palenqueras y raizales han enfrentado sexismo, racismo, clasismo, homofobia en un país que históricamente ha sido esquivo en otorgarles sus derechos. Por ello, en el Día Internacional de la Mujer Afrodescendiente, rendimos homenaje a las valientes luchadoras cuya resistencia y coraje continúan inspirándonos.
La Comisión de la Verdad alberga en su multimedia testimonios de la valentía de estas mujeres. Entre esos testimonios, queremos destacar el de Mara Vivero Vigoya, profesora de la Universidad Nacional de Colombia, quien dice: “Escuchemos las voces de parteras, cantadoras, sabedoras, bailarinas, maestras y lideresas, que se han entrenado en los oficios de la reflexión, la creación y la lucha. En momentos difíciles, estas mujeres de las comunidades negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras han elegido su propio rumbo y enfrentado un destino en un país sexista, racista, clasista y homófobo”.
Reconocemos que las mujeres afrodescendientes han tenido un impacto significativo en la sociedad. A través de su arte, música, literatura y activismo, han enriquecido la diversidad cultural y promovido cambios sociales importantes.
En esta fecha, homenajeamos a las mujeres por su labor social y su impacto cultural en sus comunidades. Es un día para celebrar sus contribuciones y reflexionar sobre los desafíos que aún enfrentan.
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Día de la Mujer Afrodescendiente
El 25 de julio de 1992, se realizó el primer encuentro de mujeres negras latinoamericanas y caribeñas en República Dominicana, donde más de 400 mujeres de 32 países se reunieron para discutir temas como el sexismo, la discriminación racial, la pobreza, la migración y la violencia. En este encuentro se institucionalizó el Día Internacional de la Mujer Afrodescendiente.
Este día es un llamado urgente a la igualdad de derechos y a la imperante necesidad de enfrentar el racismo y el sexismo que condenan a las mujeres afro a situaciones de pobreza y marginalidad. Así, se trata de combatir los estereotipos y prejuicios que las afectan, promover su participación en la vida pública y en la toma de decisiones, y exigir políticas que favorezcan su integración.
Tarea pendiente de la escuela
Las cifras de la Unidad de Atención y Reparación Integral de Víctimas evidencian una sistematicidad y desproporcionalidad en contra de las personas afrodescendientes. En Colombia, el 38% de los afrocolombianos han sido víctimas del conflicto armado, así como el 100% de los palenqueros y el 50% de la población raizal. Claramente, existe una invisibilidad estadística sobre esta forma de racismo estructural.
El reconocimiento del Día Internacional de la Mujer Afrodescendiente en las escuelas es también un llamado a fomentar un ambiente donde se respeten las diferencias y se valore la diversidad. Por ello, programas y actividades que promuevan la inclusión y la equidad deben ser parte integral del sistema educativo. Esto es esencial para construir una sociedad más justa y equitativa, comprometida con la igualdad y el respeto por todas las personas, independientemente de su origen o identidad.
La escuela, como microcosmos de la sociedad, tiene el poder de inculcar estos valores desde una edad temprana. Es vital reconocer y celebrar las contribuciones culturales, artísticas, gastronómicas y musicales de las comunidades negras para que todos los estudiantes puedan aprender y apreciar la riqueza de la herencia afrodescendiente.
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